Leer libros online, de manera gratuita!!

Estimados lectores nos hemos renovado a un nuevo blog, con más libros!!, puede visitarlo aquí: eroticanovelas.blogspot.com

Últimos libros agregados

Últimos libros agregados:

¡Ver más libros!

Grey - (16) Martes, 31 de Mayo de 2011

Volver a Capítulos

Martes 31 de Mayo de 2011

Mami se ha ido. No sé a dónde.
Él está aquí. Oigo sus botas. Son botas fuertes.
Tienen hebillas de plata. Pisan. Fuerte.
Él pisa. Y grita.
Estoy en el armario de mami.
Escondido.
Él no me escuchará.
Puedo estar quieto. Muy quieto.
Quieto porque no estoy aquí.
—¡Jodida perra! —grita.
Él grita mucho.
¡Jodida perra!
Él grita a mami.
Él me grita.
Él golpea a mami.
Él me golpea.
Oigo la puerta cerrarse. Él ya no está aquí.
Y mami se ha ido, también.
Me quedo en el armario. En la oscuridad. Estoy muy quieto.
Me siento por un largo tiempo. Un largo, largo, largo tiempo. ¿Dónde está mami?
M
Página 454
Hay un destello del amanecer en el cielo cuando abro los ojos. La alarma de la radio dice cinco y veintitrés. He dormido a ratos, plagado de sueños desagradables, y estoy agotado, pero decido ir a correr al despertarme. Una vez que estoy en chándal, recojo mi teléfono. Hay un texto de Ana.
He llegado sana y salva a Savannah.
A :)
Bien. Ella está ahí, y a salvo. La idea me agrada y escaneo rápidamente mi correo electrónico. El tema del mensaje más reciente de Ana es el primero que veo: "¿Te gusta asustarme?"
De ninguna jodida manera.
Mi cuero cabelludo pica y me siento en la cama, desplazándose a través de sus palabras. Ella debe haber enviado esto durante su escala en Atlanta, antes de que enviara su mensaje.
De: Anastasia Steele
Asunto: ¿Te gusta asustarme?
Fecha: 31 de mayo de 2011 06:52 EST
Para: Christian Grey
Sabes cuánto me desagrada que te gastes dinero en mí. Sí, eres muy rico, pero aun así me incomoda; es como si me pagaras por el sexo. No obstante, me gusta viajar en primera —mucho más civilizado que el autocar—, así que gracias. Lo digo en serio, disfruté del masaje de Jean-Paul, que era gay. Omití ese detalle en mi correo anterior para provocarte, porque estaba molesta contigo, y lo siento.
Pero, como de costumbre, tu reacción es desmedida. No me puedes decir esas cosas (atada y amordazada en un cajón; ¿lo decías en serio o era una broma?), porque me asustan, me asustas. Me tienes completamente cautivada, considerando la posibilidad de llevar
Página 455
contigo un estilo de vida que no sabía ni que existía hasta la semana pasada, y vas y me escribes algo así, y me dan ganas de salir corriendo espantada. No lo haré, desde luego, porque te extrañaría. Te echaría mucho de menos. Quiero que lo nuestro funcione, pero me aterra la intensidad de lo que siento por ti y el camino tan oscuro por el que me llevas. Lo que me ofreces es erótico y sensual, y siento curiosidad, pero también tengo miedo de que me hagas daño, física y emocionalmente. A los tres meses, podrías pasar de mí y, ¿cómo me quedaría yo? Claro que supongo que ese es un riesgo que se corre en cualquier relación. Esta no es precisamente la clase de relación que yo imaginaba que tendría, menos aun siendo la primera. Me supone un acto de fe inmenso.
Tenías razón cuando dijiste que no hay una pizca de sumisión en mí, y ahora coincido contigo. Dicho esto, quiero estar contigo, y si eso es lo que tengo que hacer para conseguirlo, me gustaría intentarlo, aunque me parece que lo haré de pena y terminaré llena de moratones… y la idea no me atrae en absoluto.
Estoy muy contenta de que hayas accedido a intentar darme más. Solo me falta decidir lo que entiendo por ―más‖, y esa es una de las razones por las que quería distanciarme un poco. Me deslumbras de tal modo que me cuesta pensar con claridad cuando estamos juntos.
Nos llaman para embarcar. Tengo que irme.
Hasta más tarde.
Tu Ana.
Me está regañando. Otra vez. Pero me sorprende con su honestidad. Es esclarecedor. Leo su correo electrónico y otra vez, y cada vez me detengo en "Tu Ana."
Mi Ana.
Ella quiere que trabajemos en esto.
Quiere estar conmigo.
Hay esperanza, Grey.
Página 456
Pongo mi teléfono en mi cama, y decido que necesito correr, para despejar mi cabeza así que puedo pensar en mi respuesta.
Tomo mi ruta habitual hasta Stewart a la Avenida Westlake luego alrededor de Denny Park un par de veces, She just likes to fight de Four Tet resuena en mis oídos.
Ana me dio una gran cantidad para procesar.
¿Le pago por sexo? Al igual que a una puta.
Nunca he pensado en ella de esa manera. La sola idea me hace enojar. Jodidamente loco. Corro de nuevo alrededor del parque, mi enojo estimulándome sucesivamente. ¿Por qué se hace esto a sí misma? Soy rico, ¿y qué? Ella solo tiene que acostumbrarse a eso. Me recuerda nuestra conversación de ayer sobre el jet de GEH. Ella no tomaría esa oferta.
Al menos no me quiere por mi dinero.
Pero, ¿me quieren en absoluto?
Ella dice que la deslumbro. Pero chico, lo ha entendido mal. Me deslumbra de una manera que nunca he experimentado, sin embargo, ha volado a través del país para alejarse de mí.
¿Cómo se supone que me sienta?
Ella está en lo correcto. Es un camino oscuro al que le estoy llevando, pero que es mucho más íntimo que cualquier relación de vainilla, o por lo que he visto. Solo tengo que mirar a Elliot y su enfoque alarmantemente casual de citas para ver la diferencia.
Y nunca haría daño físico o emocional, ¿cómo puede pensar eso? Solo quiero empujar sus límites, veo lo que hará y no hará. Sancionarla cuando pasa las líneas... sí, podría doler, pero no más allá de lo que ella puede tomar. Podemos planear lo que me gustaría hacer. Podemos tomar las cosas con calma.
Y aquí está el problema.
Si va a hacer lo que yo quiero que haga, voy a tener que tranquilizarla y darle "más". Lo que podría ser... no lo sé todavía. La he llevado a conocer a mis padres. Eso fue más, sin duda. Y eso no fue tan difícil.
Página 457
Tomo un trote lento por el parque para pensar en lo que más me molesta acerca de su correo electrónico. No es miedo, es que ella está aterrorizada de la profundidad de los sentimientos que tiene por mí.
¿Qué significa eso?
Ese sentimiento desconocido surge en mi pecho mientras mis pulmones queman por aire. Me da miedo. Me asusta tanto que me empujo más fuerte, de modo que todo lo que siento es el dolor del esfuerzo en las piernas y en mi pecho y el sudor frío que se escurre por mi espalda.
Sí. No vayas allí, Grey.
Mantén el control.
~ * ~
De regreso a mi apartamento, tomo una ducha rápida y me afeito, y luego me visto.
Gail está en la cocina cuando camino a través de camino a mi estudio.
—Buenos días, señor Grey. ¿Café?
—Por favor —le digo, sin detenerme. Estoy en una misión.
En mi escritorio, enciendo mi iMac y compongo mi respuesta a Ana.
De: Christian Grey
Asunto: ¡Por fin!
Fecha: 31 de mayo de 2011 07:30
Para: Anastasia Steele
Anastasia:
Me fastidia que, en cuanto pones distancia entre nosotros, te comuniques abierta y sinceramente conmigo. ¿Por qué no lo haces cuando estamos juntos?
Página 458
Sí, soy rico. Acostúmbrate. ¿Por qué no voy a gastar dinero en ti? Le dijimos a tu padre que soy tu novio. ¿No es eso lo que hacen los novios? Como amo tuyo, espero que aceptes lo que gaste en ti sin rechistar. Por cierto, díselo también a tu madre.
No sé cómo responder a lo que me dices que te sientes como una puta. Ya sé que no me lo has dicho con esas palabras, pero es lo mismo. Ignoro qué puedo decir o hacer para que dejes de sentirte así. Me gustaría que tuvieras lo mejor en todo. Trabajo muchísimo, y me gusta gastarme el dinero en lo que me apetezca. Podría comprarte la ilusión de tu vida, Anastasia, y quiero hacerlo. Llámalo redistribución de la riqueza, si lo prefieres. O simplemente ten presente que jamás pensaría en ti de la forma que dices y me fastidia que te veas así. Para ser una joven tan guapa, ingeniosa e inteligente, tienes verdaderos problemas de autoestima y me estoy pensando muy seriamente concertarte una cita con el doctor Flynn.
Siento haberte asustado. La idea de haberte inspirado miedo me resulta horrendo. ¿De verdad crees que te dejaría viajar como una presa? Te ofrecí mi jet privado, por el amor de Dios. Sí, era una broma, y muy mala, por lo visto. No obstante, la verdad es que imaginarte atada y amordazada me excita (esto no es broma: es cierto). Puedo prescindir del cajón; los cajones no me atraen. Sé que no te agrada la idea de que te amordace; ya lo hemos hablado: cuando lo haga —si lo hago—, ya lo hablaremos. Lo que parece que no te queda claro es que, en una relación amo/sumiso, es el sumiso el que tiene todo el poder. Tú, en este caso. Te lo voy a repetir: eres tú la que tiene todo el poder. No yo. En la casita del embarcadero te negaste. Yo no puedo tocarte si tú te niegas; por eso debemos tener un contrato, para que decidas qué quieres hacer y qué no. Si probamos algo y no te gusta, podemos revisar el contrato. Depende de ti, no de mí. Y si no quieres que te ate, te amordace y te meta en un cajón, jamás sucederá.
Quiero compartir mi estilo de vida contigo. Nunca he deseado nada tanto. Francamente, me admira que una joven tan inocente como tú esté dispuesta a probar. Eso me dice más de ti de lo que te puedas imaginar. No acabas de entender, pese a que te lo he dicho en innumerables ocasiones, que tú también me tienes hechizado. No quiero perderte. Me angustia que hayas tomado un avión y vayas a estar a casi cinco mil kilómetros de mí varios días porque no puedes pensar con claridad cuando me tienes cerca. A mí me pasa lo mismo,
Página 459
Anastasia. Pierdo la razón cuando estamos juntos; así de intenso es lo que siento por ti.
Entiendo tu inquietud. He intentado mantenerme alejado de ti; sabía que no tenías experiencia —aunque jamás te habría perseguido de haber sabido lo inocente que eras—, y aun así me desarmas por completo como nadie lo ha hecho antes. Tú correo, por ejemplo; lo he leído y releído un montón de veces, intentando comprender tu punto de vista. Tres meses me parece una cantidad arbitraria de tiempo. ¿Qué te parece seis meses, un año? ¿Cuánto tiempo quieres? ¿Cuánto necesitas para sentirte cómoda? Dime.
Comprendo que esto es un acto de fe inmenso para ti. Debo ganarme tu confianza, pero, por la misma razón, tú debes comunicarte conmigo si no lo hago. Pareces fuerte e independiente, pero luego leo lo que has escrito y veo otro lado tuyo. Debemos orientarnos el uno al otro, Anastasia, y solo tú puedes darme pistas. Tienes que ser sincera conmigo y los dos debemos encontrar un modo de que nuestro acuerdo funcione.
Te preocupa no ser dócil. Bueno, quizá sea cierto. Dicho esto, debo reconocer que solo adoptas la conducta propia de una sumisa en el cuarto de juegos. Parece que ese es el único sitio en el que me dejas ejercer verdadero control sobre ti y el único en el que haces lo que te digo. ―Ejemplar‖ es el calificativo que se me ocurre. Y yo jamás te llenaría de moretones. Me va más el rosa. Fuera del cuarto de juegos, me gusta que me desafíes. Es una experiencia nueva y refrescante, y no me gustaría que eso cambiara. Así que sí, dime a qué te refieres cuando me pides más. Me esforzaré por ser abierto y procuraré darte el espacio que necesitas y mantenerme alejado de ti mientras estés en Georgia. Espero con ilusión tu próximo correo.
Entretanto, diviértete. Pero no demasiado.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
Presiono enviar y tomo un sorbo de mi frío café.
Ahora tienes que esperar, Grey. Ver lo que ella dice.
Página 460
Me dirijo a la cocina para ver lo que Gail ha preparado para el desayuno.
~ * ~
Taylor está esperando en el auto para llevarme rápidamente al trabajo.
—¿Qué es lo que querías anoche? —le pregunto.
—No era nada importante, señor.
—Bien —respondo y miro por la ventana, tratando de colocar a Ana y Georgia fuera de mi mente. Fallo miserablemente, pero una idea comienza a tomar forma.
Llamo a Andrea.
—Buenos días.
—Buenos días, Sr. Grey.
—Estoy en camino, ¿pero puede comunicarme a Bill?
—Sí, señor.
Un momento más tarde, tengo a Bill en la línea.
—Sr. Grey.
—¿Su gente vería a Georgia como una opción para colocar la planta de tecnología? ¿A Savannah en particular?
—Creo que lo hemos hecho, señor. Pero necesito comprobarlo.
—Compruébelo. Y me avisa.
—Lo haré. ¿Eso es todo?
—Por ahora. Gracias.
~ * ~
Mi día está lleno de reuniones. Miro mi correo electrónico esporádicamente, pero no hay nada de Ana. Me pregunto si está intimidada por el tono de mi correo electrónico, o si está ocupada haciendo otras cosas.
¿Qué otras cosas?
Página 461
Es imposible evitar pensar en ella. Durante todo el día, intercambio mensajes de texto con Caroline Acton, aprobando y vetando vestidos que son elegidos para Ana. Espero que le gusten: se verá impresionante en todos ellos.
Bill regresa con un sitio potencial cerca de Savannah para nuestra planta. Ruth está haciendo las averiguaciones.
Al menos no es Detroit.
Elena me llama, y decidimos cenar en el Columbia Tower.
—Christian, estás siendo tan evasivo sobre esta chica —reprende.
—Te diré todo esta noche. En estos momentos, estoy ocupado.
—Tú siempre estás ocupado. —Se ríe.
—Te veo a las ocho.
—Hasta luego, entonces.
¿Por qué las mujeres en mi vida son tan entrometidas? Elena. Mi madre. Ana... me pregunto por enésima vez lo que está haciendo. Y he aquí, una respuesta de ella, por fin.
De: Anastasia Steele
Fecha: 31 de mayo de 2011 19:08 EST
Para: Christian Grey
Asunto: ¿Elocuente?
Señor, eres un escritor elocuente. Tengo que ir a cenar al club de golf de Bob y, para que lo sepas, estoy poniendo los ojos en blanco solo de pensarlo. Pero, de momento, tú y tu mano suelta están muy lejos de mí. Me encantó tu correo. Te contesto en cuanto pueda. Ya te extraño.
Disfruta de tu tarde.
Tu Ana
Página 462
No es un ―no‖, y me está extrañando. Estoy aliviado y contento por su tono. Así que respondo.
De: Christian Grey
Fecha: 31 de mayo de 2011 16:10
Para: Anastasia Steele
Asunto: Su trasero
Querida señorita Steele:
Me tiene distraído el asunto de este correo. Huelga decir que, de momento, está a salvo.
Disfrute de la cena. Yo también la extraño, sobre todo su trasero y esa lengua viperina suya.
Mi tarde será aburrida y solo me la alegrará pensar en usted y en sus ojos en blanco. Creo que fue usted quien juiciosamente me hizo ver que también yo tengo esa horrenda costumbre.
Christian Grey
Presidente que acostumbra a poner los ojos en blanco, de Grey Enterprises Holdings, Inc.
Unos minutos después su respuesta pita en mi bandeja de entrada.
De: Anastasia Steele
Fecha: 31 de mayo de 2011 19:14 EST
Para: Christian Grey
Página 463
Asunto: Ojos en blanco
Querido señor Grey:
Deja de mandarme correos. Intento arreglarme para la cena. Me distraes mucho, hasta cuando estás en la otra punta del país. Y sí, ¿quién te da unos azotes a ti cuando eres tú el que pone los ojos en blanco?
Tu Ana
Oh, Ana. Tú lo haces.
Todo el tiempo.
La recuerdo diciéndome que no me mueve y tirando mi vello púbico mientras estaba sentada a horcajadas sobre mí, desnuda. La idea es excitante.
De: Christian Grey
Fecha: 31 de mayo de 2011 16:18
Para: Anastasia Steele
Asunto: Su trasero
Querida señorita Steele:
Me gusta más mi asunto que el tuyo, en muchos sentidos. Por suerte, soy el dueño de mi propio destino y nadie me castiga. Salvo mi madre, de vez en cuando, y el doctor Flynn, claro. Y tú.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
Página 464
Me encuentro tamborileando mis dedos, esperando por su respuesta.
De: Anastasia Steele
Fecha: 31 de mayo de 2011 19:22 EST
Para: Christian Grey
Asunto: ¿Castigarte yo?
Querido señor:
¿Cuándo he tenido yo valor de castigarle, señor Grey? Me parece que me confunde con otra, lo cual resulta preocupante. En serio, tengo que arreglarme.
Tu Ana
Tú. Me castigas por correo electrónico en cada oportunidad. ¿Y cómo podría siquiera confundirte con alguien más?
De: Christian Grey
Asunto: Tu trasero
Fecha: 31 de mayo 2011 16:25
Para: Anastasia Steele
Querida señorita Steele: Lo hace constantemente por escrito. ¿Me deja que le suba la cremallera del vestido?
Christian Grey
Página 465
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
De: Anastasia Steele
Asunto: Para mayores de 18 años
Fecha: 31 mayo 2011 19:28 EST
Para: Christian Grey
Preferiría que me la bajaras.
Sus palabras viajan directamente a mi polla, pasando "Ve" en el camino.
Mierda.
Esto requiere, ¿cómo las llamó ella? MAYÚSCULAS GRITONAS.
De: Christian Grey
Asunto: Cuidado con lo que deseas...
Fecha: 31 de mayo 2011 16:31
Para: Anastasia Steele
YO TAMBIÉN.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
De: Anastasia Steele
Asunto: Jadeando
Página 466
Fecha: 31 mayo 2011 19:33 EST
Para: Christian Grey
Muy despacio...
De: Christian Grey
Asunto: Gruñendo
Fecha: 31 mayo 2011 16:35
Para: Anastasia Steele
Ojalá estuviera allí.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
De: Anastasia Steele
Asunto: Gimiendo
Fecha: 31 de mayo 2011 19:37 EST
Para: Christian Grey
OJALÁ.
¿Quién más puede encenderme mediante un correo electrónico?
De: Anastasia Steele
Página 467
Asunto: Gimiendo
Fecha: 31 mayo 2011 19:39 EST
Para: Christian Grey.
Tengo que irme.
Hasta luego, nene.
Esbozo una sonrisa torcida ante sus palabras.
De: Christian Grey
Asunto: Plagio
Fecha: 31 mayo 2011 16:41
Para: Anastasia Steele
Me robaste la frase. Y me dejaste colgado.
Disfruta de la cena.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
Andrea toca la puerta con los nuevos esquemas de Barney para la tableta de energía solar que estamos desarrollando. Le sorprende que esté contento de verla.
—Gracias, Andrea.
—De nada, Sr. Grey. —Me da una curiosa sonrisa—. ¿Quiere un café?
—Por favor.
Página 468
—¿Leche?
—No, gracias.
~ * ~
Mi día ha mejorado enormemente. He golpeado a Bastille en su trasero dos veces en nuestras dos rondas de kickboxing. Eso nunca sucede. En cuanto me deslizo en mi chaqueta después de mi ducha, me siento preparado para hacer frente a Elena y todas sus preguntas.
Aparece Taylor.
—¿Quieres que conduzca yo, señor?
—No. Me quedo con el R8.
—Muy bien, señor.
Antes de salir, verifico mi correo electrónico.
De: Anastasia Steele
Asunto: Mira quién habla
Fecha: 31 de mayo 2011 22:18 EST
Para: Christian Grey
Señor, si no recuerdo mal, la frase era de Elliot.
¿Sigues colgado?
Tu Ana
¿Está coqueteando conmigo? ¿Otra vez? Y es mi Ana. De nuevo.
De: Christian Grey
Página 469
Asunto: Pendiente.
Fecha: 31 mayo 2011 19:22
Para: Anastasia Steele
Señorita Steele: Ha vuelto. Se ha ido tan de repente, justo cuando la cosa empezaba aponerse interesante.
Elliot no es muy original. Le habrá robado esa frase a alguien.
¿Qué tal la cena?
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
Presiono enviar.
De: Anastasia Steele
Asunto: ¿Pendiente?
Fecha: 31 mayo 2011 22:26 EST
Para: Christian Grey
La cena me llenó; te gustará saber que comí hasta hartarme. ¿Se estaba poniendo interesante? ¿En serio?
Me alegro de que esté comiendo...
De: Christian Grey
Asunto: Negocios Inconclusos-Definitivamente
Página 470
Fecha: 31 mayo 2011 19:30
Para: Anastasia Steele
¿Te estás haciendo la tonta? Me parece que acababas de pedirme que te bajara la cremallera del vestido. Y yo estaba deseando hacerlo. Me alegra saber que estás comiendo bien.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
De: Anastasia Steele
Asunto: Bueno, siempre nos queda el fin de semana
Fecha: 31 mayo 2011 22:36 EST
Para: Christian Grey
Pues claro que como... Solo la incertidumbre que siento cuando estoy contigo me quita el apetito. Y yo jamás me haría la tonta, señor Grey.
Seguramente ya te habrás dado cuenta. ;)
¿Ella pierde el apetito a mí alrededor? Eso no es bueno. Y se está burlando de mí. Una vez más.
De: Christian Grey
Asunto: Estoy impaciente
Fecha: 31 mayo 2011 19:40
Para: Anastasia Steele
Página 471
Lo tendré presente, señorita Steele, y, por supuesto, utilizaré esa información en mi beneficio. Lamento saber que le quito el apetito. Pensaba que tenía un efecto más concupiscente en usted. Eso me ha pasado a mí también, y bien placentero que ha sido.
Espero impaciente la próxima ocasión.
Christian Grey
Presidente de Grey Enterprises Holdings, Inc.
De: Anastasia Steele
Asunto: Flexibilidad léxica
Fecha: 31 mayo 2011 22:36 EST
Para: Christian Grey
¿Has estado revisando otra vez al diccionario de sinónimos?
Me carcajeo de risa.
De: Christian Grey
Asunto: Me ha pillado
Fecha: 31 mayo 2011 19:40
Para: Anastasia Steele
Qué bien me conoce, señorita Steele.
Voy a cenar con una vieja amistad, así que estaré conduciendo.
Hasta luego, nena©.
Página 472
Christian Grey
Presidente Ejecutivo de Grey Enterprises Holdings, Inc.
Por mucho que me gustaría mantener las bromas con Ana, no quiero llegar tarde para la cena. Si fuera yo, Elena estaría disgustada. Apago la portátil, recojo mi billetera y teléfono, y tomo el ascensor hasta el garaje.
~ * ~
El Club Alta Millaestá en el pent-house deColumbia Tower. El sol se hunde hacia las cumbres del Parque Nacional Olímpico, coloreando el cielo con una impresionante fusión de naranjas, rosas, y ópalos. Es impresionante. A Ana le encantaría esta vista. Debo traerla aquí.
Elena está sentada en una mesa del rincón. Me da un pequeño gesto con la mano y una gran sonrisa. El maître me acompaña hasta su mesa, y ella se levanta, me muestra su mejilla.
—Hola, Christian—ronronea.
—Buenas noches, Elena. Te ves muy bien, como siempre. —Beso su mejilla. Ella sacude su lacio cabello platinado hacia un lado, lo que hace cuando se siente juguetona.
—Siéntate —dice—. ¿Qué quieres tomar? —Sus dedos y sus uñas escarlatas están envueltos alrededor de una copa de champán.
—Veo que has comenzado con el Cristal.
—Bueno, creo que tenemos algo que celebrar, ¿no?
—¿De verdad?
—Christian. Esta chica. Suéltalo todo.
—Voy a tomar una copa de Mendocino Sauvignon Blanc —le digo al camarero revoloteando. Él asiente y se aleja rápidamente.
—Por lo tanto, ¿no es un motivo de celebración? —Elena toma un sorbo de champán, levantando las cejas.
—No sé por qué estás haciendo una gran cosa de esto.
Página 473
—No estoy haciendo una gran cosa. Tengo curiosidad. ¿Cuántos años tiene? ¿Qué hace?
—Acaba de graduarse.
—Oh. ¿Un poco joven para ti?
Arqueo una ceja.
—¿En serio? ¿Vas a ir allí?
Elena se ríe.
—¿Cómo está Isaac? —pregunto con una sonrisa torcida.
Se ríe de nuevo.
—Comportándose—Sus ojos brillan con picardía.
—Qué aburrido para ti. —Mi voz es seca.
Sonríe, resignada.
—Es una buena mascota. ¿Pedimos?
~ * ~
A mitad de la sopa de cangrejo, saco a Elena de su miseria.
—Su nombre es Anastasia, estudió literatura en la Estatal de Washington, y la conocí cuando vino a entrevistarme para la revista estudiantil. Di el discurso de graduación de este año.
—¿Está en tu estilo de vida?
—Todavía no. Pero tengo esperanzas.
—Vaya.
—Sí. Escapó a Georgia para pensar en ello.
—Es un largo camino por recorrer.
—Lo sé. —Bajo la mirada hacia mi sopa, preguntándome cómo está Ana y lo que está haciendo; durmiendo, espero... sola. Cuando levanto mi cabeza, Elena me estudia. Atentamente.
—No te he visto así —dice ella.
—¿Qué quieres decir?
Página 474
—Estás distraído. No pareces tú.
—¿Es tan obvio?
Asiente, sus ojos suavizándose.
—Obviamente para mí. Creo que ella ha puesto tu mundo al revés.
Inhalo bruscamente pero escondo el hecho levantando mi copa a mis labios.
Perceptiva, Sra. Lincoln.
—¿Tú crees? —murmuro después de sorber.
—Lo creo —dice, sus ojos buscando los míos.
—Es encantadora.
—Estoy segura de que esto es nuevo. Y apuesto a que estás preocupado por lo que está haciendo en Georgia, lo que está pensando. Sé cómo eres.
—Sí. Quiero que tome la decisión correcta.
—Deberías ir a verla.
—¿Qué?
—Súbete a un avión.
—¿De verdad?
—Si está indecisa. Ve, utiliza tu considerable encanto.
Mi resoplido es burlón.
—Christian—regaña ella—, cuando quieres mucho algo, vas tras ello y siempre ganas. Tú lo sabes. Eres tan negativo sobre ti mismo. Me sacas de quicio.
Suspiro.
—No estoy seguro.
—La pobre chica está probablemente aburrida hasta las lágrimas allí abajo. Ve. Obtendrás tu respuesta. Si es no, puedes seguir adelante, si es sí, puedes disfrutar de ser tú mismo con ella.
Página 475
—Ella estará de vuelta el viernes. —Aprovecha el día, mi querido. —Dijo que me extrañaba. —Tienes que ir. —Sus ojos destellan certeza. —Pensaré sobre ello. ¿Más champán? —Por favor—dice, y me da una sonrisa de niña. ~ * ~ Conduciendo de vuelta al Escala, contemplo el consejo de Elena. Podría ir a ver a Ana. Dijo que me extrañaba... El jetestá disponible. Al volver a casa, leo su último correo electrónico. De: Anastasia Steele Asunto: Compañeros de cena apropiados Fecha: 31 mayo 2011 23:58 EST Para: Christian Grey Espero que esa amistad tuya y tú hayan pasado una velada agradable. Ana P.D.: ¿Era la señora Robinson? Mierda. Esta es la excusa perfecta. Esto va a necesitar una respuesta en persona.
Página 476
Llamo a Taylor y le digo que voy a necesitar a Stephan y el Gulfstream9 en la mañana. —Muy bien, señor Grey. ¿Adónde va? —Vamos a Savannah. —Sí, señor. —Y hay un toque de diversión en su voz.


Volver a Capítulos

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Ir a todos los Libros